Si hay una salsa que parezca que este hecha aposta para el pollo o la gallina, es sin duda la tradicional salsa pepitoria, se trata de mas que un pollo en salsa un guiso de pollo muy simple y fácil, pero con un resultado muy sabroso.
En esta ocasión te recomiendo unas pechugas muy jugosas y con un sabor insuperable, están tan sabrosas que te aseguro que si tienes pan en la mesa no podrás resistirte a mojar la salsa.
La elaboración es muy simple, ya que tan solo hay que cocinar las pechugas para que queden bien doradas y las reservas, ahora se preparar un pequeño sofrito con ajo y cebolla, se vierte el vino blanco y se deja reducir bien, se añade las pechugas que habías reservado y viertes el caldo de pollo, lo dejas cocinar unos minutos y preparas el picadillo, lo añades al guiso y lo dejas que se cocine unos 5 minutos más, ya lo tienes listo para servir.
Unas pequeña consideraciones para hacerte la receta mas fácil son, que puedes usar cualquier parte del pollo, no es necesario que sean pechugas, puedes usar muslos sin hueso ni piel, otra cosa importante es el caldo que puede ser de carne o incluso concentrado diluido en agua, si no dispones de ningún caldo a mano.
En el vídeo siguiente puedes ver la elaboración explicada paso a paso y de forma muy sencilla, para que no y tengas dudas en la receta y disfrutes de este gran plato.
INGREDIENTES
- 900 g de pechuga de pollo sin hueso ni piel
- 1 Cebolla
- 3 dientes de ajo
- 600 ml de caldo de pollo
- Sal y pimienta al gusto
- 5 Cda de aceite de oliva
Para el picadillo
- 200 ml de vino blanco
- 2 Yemas de huevo cocido
- 3 Dientes de ajo
- 50 g de cacahuetes pelados y tostados
- Perejil picado (3 Cda aprox.)
- 200 de caldo de pollo
(4 personas)
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