Lo mejor es su cremosidad y sabor, se trata de una tarta fría con un sabor muy especial ya que es dulce, pero con un toque ácido gracias a la piña, aunque también es crujiente ya que lleva galletas, que aunque pueden ser las que prefieras, yo te aconsejo que uses galletas tostadas, que aguantan muy bien el remojado y suelen quedarse algo crujientes. La elaboración es muy sencilla y mas si sigues los pasos del vídeo, pero tiene su tiempo de reposo en el frigorífico, para que la tarta quede compacta. Otra cosa importante es la gelatina, ya sabes que puedes usarla en hojas, como en el vídeo o en polvo. Ya sabes que todas mis recetas son muy fáciles de preparar, pero de todas formas puedes ver como se hacen en el siguiente vídeo. INGREDIENTES 400 g de leche condensada 500 g de nata líquida para montar o crema de leche 150 ml de jugo de piña 200 g de piña natural o en su jugo 38 galletas tostadas aprox. Jugo de piña para bañar las galletas 6 hojas de gelatina
recetas de cocina tradicional, recetas fáciles y caseras con el sabor de siempre